Sigo vivo.

Se me ocurrían muchos títulos para este post y todos querían resumir que después de un mes sin dar señales de vida sigo aquí. Es como si después del anterior "3000km y subiendo" me hubiera dado con el techo en la cabeza. Por lo menos ahora parece que todo está más tranquilo y podré centrarme más en mis aficiones a las que les he robado todo el tiempo. Nunca me imaginé que una mudanza pudiera llevar tanto tiempo y esfuerzo. Ya estoy instalado en mi nuevo hogar y espero disfrutarlo desde ya. Lo único es que después de pasar 4 semanas totalmente centrado en otras prioridades me encuentro a dos semanas de Lanzarote y sin los deberes hechos. Ahí no vale copiar y creo que tampoco se puede dejar para septiembre así que... Dios reparta suerte, porque como reparta justicia...

Estoy seguro de que todos hemos guardado algún objeto y lo hemos descubierto con el paso del tiempo. Es curiosa la capacidad que tenemos de poner tanto sentimiento en las cosas materiales y revivir momentos entrañables al tocarlos, verlos, olerlos. Estos días he descubierto que yo tengo muchos momentos escondidos en demasiados objetos Así que una campaña de "mierdas las justas" no viene mal de vez en cuando. Muestra de ello es la colección de gorros de las carreras que mejor recuerdo me han dejado. Espero no olvidarme de ellas porque a los gorros les queda poco tiempo. Si alguno tiene algún capricho que me de un toque. Hasta pronto, espero.